jueves, 10 de enero de 2013

Mi némesis, ¿mi amigo?

el dibujo que me dio cagada dibujar.

La cuestión es la siguiente, yo, joven imberbe, ignorante de muchas cosas, de otras no tanto, estoy en la obligación de escribir un ensayo, un ensayo sobre:

“Las consecuencias socio-políticas de cualquier cosa importante que haya pasado en el país en la última década, o en las dos últimas décadas, o en las tres décadas, o en cualquier puta década.”

Pienso y digo, otra vez escribir, escribir, escribir, y escribir, escribir para que al final el profesor, (mi némesis) me diga, mmmmmmmmmmmmmmmm (él siempre hace pausas muy largas) mmmmmmmmmmmmm, está bien pero le falta, pero nunca me dice que le falta, o lo que falta, o cual es la puta falta, no me dice nada, nadita, nada, y pienso, a quien le falta algo es a usted querido profesor, le falta cerebro, le falta paciencia, le falta sexo, mucho pero mucho sexo, sexo del bueno, sexo del rico, sexo que le quite esa cara de culo. Pero quien tiene cara de culo soy yo, yo, yo que tengo que repetir el ensayo que he repetido durante el último mes, y que probablemente repita en lo que queda de mes, pero entonces mi lado malito dice, véngate, véngate, y yo digo, SIIIII, VENGANZA, VENGANZA, KILL THE PROFE, KILL, KILL, pero no puedo kill, kill, entonces en vez del ensayo, hago un dibujo de mí elefante punketo dándole una buena lección a mi profesor, y digo, sí, así se hace mi elefante, mi elefante querido, castiga mi castigo, término el dibujo, término mi venganza, la término y el profesor dice, chino deje así, deje así, que yo no necesito ningún ensayo y usted no necesita este castigo, es libre, libre, libre, escucho libre y en mi cabeza suena “Wannabe” de las Spice Girls .


"Yo I'll tell you what I want, what I really want

So tell me what you want, what you really really want
I'll tell you what I want, what I really want
So tell me what you want, what I really really want
I wanna [huh], I wanna [huh], I wanna [huh]
I wanna really really really wanna zigazig ahh"

En mi cabeza suenan las Spice Girls y pienso tres cosas:


Primero: huy, que rica que estaba la Emma Burton, que rica ella, que rica sus tetas.


Segundo: las Spice Girls, en serio, ¿estaré enfermito como mi perrito loquito?

Tercero: ¡¿Qué, libre, libre yo?!¡¿Cómo así?!¡¿Cómo así?!¡¿Cómo así?!¡¿Y aquí que paso?

Y sin yo entender nada, nadita, nada, dejo que el profesor se acerque y diga, mmmmm, vacano su dibujo, hablemos de la vida, y así es, hablamos de la vida, de mi vida, de su vida, de la música, de la buena música, de música de Aterciopelados, de la música de Sociedad Anónima, hablamos Bob Dylan, de David Bowie, de los Rolling Stones, de Jefferson and the Airplane, de Mars Volta, de Beirut, y de muchos otros grupos, hablamos de la televisión, de la buena y mala televisión, hablamos de política, de religión, del rector, hablamos de todo, de todo lo que se podía hablar, hablamos y al final del día me quedo la sensación de no entender nada, pero absolutamente nada de nada, no entendía al profesor, no me entendía yo, y como entre entender y no entender, me fue dando cagada, cagada del profesor, cagada por dibujar al elefante punketo, cagada de eso y de mucha otras cosa, me dio tanta cagada que al final no pude disfrutar mi libertad.




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